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28 DE ENERO DE 2023 

 

 

 

 

 

Hermógenes Pérez de Arce


De mi consideración: Te metiste en un "forro": arreglar algo que funcionaba, antes del actual régimen de facto. Lo que hay que cambiar es este último, no la Constitución, sin perjuicio de reformarla para mejor.

Bajo ella Chile pasó a ser el primer país de América Latina, tras haber sido el último en 1973. ¿Cómo lo logramos? Arreglando lo que funcionaba mal. Lo contrario de lo que te piden ahora. Pinochet entregó un país en que: (1) El terrorismo estaba derrotado, con 928 terroristas presos. (2) La Araucanía estaba contenta, sin conflictos, (3) El delito y sus autores eran castigados, no quienes lo combatían. (4) Entre 1985 y 1990 se había  bajado impuestos, crecido al doble, equilibrado el presupuesto, disminuido la deuda externa y reducido el desempleo a 5 %. Pero el trayecto previo había sido duro, implicado años de ajustes dolorosos, como echar al 30 % de la burocracia excesiva. Después vinieron los "años dorados". Pues "lo que el árbol tiene de florido/ vive de lo que tiene sepultado. (Bernárdez).

Hoy nos hemos "disparado en el pie" y vuelto a tropezar con la misma piedra: Chile ha elegido otro gobierno socialista-comunista y su economía está de nuevo decreciendo y ocupando el último lugar en América Latina . Hemos "quemado lo que ayer adoramos y adorado lo que ayer quemamos". Y los responsables, Boric y Piñera, ambos en busca de impunidad política, se han puesto de acuerdo en un contubernio y te han hecho parte del problema, no de la solución. ¿Alguna vez pensaste que ibas a trabajar con y para los comunistas?

Tu quehacer será inconstitucional y, por tanto, nulo. La Constitución vigente, y también la de 1925, advierten: "Ninguna magistratura, ninguna persona ni reunión de personas pueden atribuirse, ni aun a pretexto de circunstancias extraordinarias, otra autoridad o derechos que los que expresamente les hayan conferido la Constitución y las leyes. Todo acto en contravención a este artículo es nulo". En "El Mercurio" del 17.de enero el ministro del Tribunal Constitucional y profesor de Derecho Constitucional de la Universidad de Chile, José Ignacio Vásquez,  expresa; "Las normas constitucionales actuales no facultan a los poderes colegisladores para elaborar una nueva Constitución".

Al no haberse originado en un plebiscito de entrada, tu proceso constituyente es nulo. Pero, consciente de que estás siendo objeto de una fuerza mayor, no eres cómplice, sino víctima. Tú debes participar para defender el bien y contener el mal. Yo mismo votaré el 7 de mayo en calidad de víctima y no de cómplice, procurando minimizar el mal causado al país por un contubernio espurio..

Debes defender los principios de una sociedad libre, como la subsidiariedad del Estado, la familia, la libertad de las personas, su propiedad y libre iniciativa, creando salvaguardias contra la voracidad estatal.

Y tú, yo y todos debemos votar bien el 7 de mayo, por un candidato republicano, del único partido que ha defendido la Constitución y se ha opuesto a este proceso en que te has visto envuelto. Tenemos tres metas: que los republicanos superen a los partidos entreguistas de Piñera; que la suma de votos de derecha y centroderecha supere a los de izquierda; y que en el plebiscito final sea derrotado el proyecto inconstitucional y, por tanto, siga vigente la Constitución, que después modificaremos para mejor. 

No te desanimes por haber sido convocado a una actividad inconstitucional. No es de responsabilidad tuya. Pero prepárate para ayudarnos a reformar después que ella haya sido ratificada por enésima vez, votando "en contra" del nuevo engendro en el plebiscito de salida. Después buscaremos lo mejor en el futuro gobierno de derecha que regirá los destinos del país al término, anticipado o no, del caótico desgobierno actual.

Tranquilo, experto(a). Lo peor es lo que está sucediendo, Chile está perdido, pero lo vamos a recuperar..

Fuente: http://blogdehermogenes.blogspot.com/

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