Imprimir

 

 

 

 

 

 

 

 

Osvaldo Rivera Riffo
Director Fundación Voz Nacional


"No confundamos la prudencia con la cobardía. La prudencia es una virtud "
Alejandro Dumas


Participo en varios grupos de chat de la más variopinta composición. En ellos hay personas lindas, que cariñosamente aplauden las irónicas ocurrencias que suelen caracterizar mis escritos y otros, no tan lindos, me retan porque critico o mejor dicho condeno el actuar de Piñera y algunos de sus amanuenses. Pero no podría ser de otra manera. No soy de aquellos que por haber votado por Piñera, como mal menor, me sienta comprometido a aplaudir cada una de sus torpes y equivocadas intervenciones y, peor aún, sus descriterios políticos como el haber olvidado un merecido homenaje público a Sergio Onofre Jarpa y hacerlo encerrado en Palacio con sus íntimos. No fue el caso de los comunistas, Marín, Volodia, u otro que se me escapa, o sus sentimientos acompañando el féretro del tirano Chávez.

En fin, ya que me han reprochado diciéndome que al votar por Piñera debo ser benevolente, entonces, para responder a ello, recordé una marcha ocurrida por allá por el año 72, de izquierdistas apoyando al funesto presidente de la época, donde un señor de cierta edad, llevaba un letrero que decía: "Este es un gobierno de mierda pero es el mío". Por si algún sentimiento de culpa me cabe, hago mía la frase y repito lo mismo, hoy en abril de 2020.

Y lo hago pensando en la intervención del señor ministro de Hacienda, recientemente en ICARE, donde hasta ese momento en todas sus participaciones públicas nunca había mostrado la hilacha. Lo hizo después de su clara explicación, vía streaming, donde con la frialdad necesaria desarrolló los temas de interés en una agenda progresiva de tal manera de defender la vida amenazada por el Covid19 y el desarrollo económico de tal forma de hacerle frente al descalabro provocado por el virus de la violencia y destrucción primero, a manos de la izquierda, y luego a la paralización económica por el virus chino. En estas materias ha sido extremadamente prudente y veraz, llamando a mantener un bolsillo austero y conminando a prepararse para el periodo de vacas flacas que ya está comenzando.

Sin embargo y a tiro de escopeta se salió del libreto e hizo un llamado a retomar el camino del plebiscito programado para octubre. ¿Se trapicó, ministro? o tuvo que meter la cuchara en un tema político porque así fueron las instrucciones de Evopoli o, peor aún, de su Jefe. Mala cosa, Ud. ha dicho que se necesitarán muchos recursos para paliar la crisis y usted mismo ha declarado que el endeudamiento del país subirá en gran medida. Pues bien, ¿nos va a decir que para la borrachera plebiscitaria, los 35 mil millones los pedirá prestado para gastarlos en una irresponsabilidad política sin parangón en nuestra historia y solo comparable al derroche, despilfarro y saqueo de las arcas públicas en el gobierno comunista de Allende?

Se destapó una cajita de pandora ya que luego habló Blumel y luego el Presidente poniendo dudas legítimas sobre este chantaje político. Y se desató la furia de todo el espectro izquierdista proclamando a todos los vientos que dicha imposición debe realizarse en la fecha prevista. Hay que tener muy poca hombría de bien para seguir perjudicando a Chile por meros intereses politiqueros. Ojala esta manga de inútiles sean castigados con lo que tanto les gusta, el veredicto popular.

En el intertanto, hasta un ex locutor de televisión hace encuestas relacionadas con el tema, ¡no hay salud!!! Pero a su disgusto y al igual que todas las que han hecho los connotados twitteros izquierdistas, siempre gana el Rechazo… ¿será la voz del pueblo?

No pues señor ministro, la mujer del Cesar no sólo tiene que serlo sino que parecerlo y si Ud. quiere conservar su talante de seriedad y conocimiento de las materias que domina, no se meta en camisas de once varas y escuche al pueblo que sólo quiere que dicho chantaje político no se realice y podamos salir adelante gastando esa brutalidad de dinero en fuentes de trabajo o en apoyo a los que más lo necesitan.

No baile con la fea ministro, deje ese numerito a otros que están en la vereda opuesta donde no abundan las ideas, pero sí las feas.

"Es prudente no fiarse por entero de quienes nos han engañado una vez"
René Descartes

 

Visto: 1017