01 julio 2024
Tomas Bradanovic
*** Disclaimer ***
No quiero decir que en Chile terminaremos con una crisis como la boliviana; hay una gran distancia todavía para eso porque acá tenemos un electorado algo más informado. No tengo duda que a partir de las elecciones que vienen -con más o menos rapidez- corregiremos los actuales desastres. Pero veamos:
*** Fin del disclaimer ***
Lo que si es cierto, es que vamos transitando el mismo camino de Bolivia. Muchos acá en Chile se creen más capaces y superiores a los bolivianos, pero resulta que el pueblo que vota comete las mismas estupideces en las elecciones, y también se equivoca al evaluar las decisiones políticas que se toman.
Las elecciones de Lagos en 2000, Bachelet en 2006 y 2014, Piñera en 2010 y 2018, y finalmente a Boric en 2022 muestran un nivel de estupidez y ceguera política muy parecida a los votantes bolivianos que votaron una y otra vez por Morales y luego pusieron a Arce de presidente.
Similitud 1: los impuestazos
Leo en la Revista Economía y Sociedad el artículo de Tomás Flores Estancamiento: el enorme costo de los malos acuerdos, donde muestra como desde 2012 hasta el 2022 la inversión per cápita ha estado estancada e incluso bajando en Chile. Fíjense bien en el año: 2012, justo después del primer gobierno de Bachelet.
Antes de Bachelet, Lagos trajo inversión a Chile pero de la peor calidad, con sus amigos del PSOE español que se habían enriquecido en su país, notorios coimeros, ladrones de cuello y corbata que depredaron nuestro país con grandes proyectos y concesiones otorgadas por nuestro estado.
El estancamiento de la inversión se consolidó en 2014 durante el segundo gobierno de Bachelet y los siguientes 10 años ya estábamos fregados.
El superciclo del cobre sirvió para tapar los efectos de la espantosa reforma tributaria del ministro Arenas, que subió el impuesto a las empresas del 20% al 27%
Ignorantes, incapaces, como Jorrat, Arenas y la propia Bachelet no se dieron cuenta que esta alza de impuestos -que hacia inviables a los proyectos con menos margen de retorno- iba a tener un costo incalculable para el país.
Fue exactamente lo mismo que pasó cuando Morales "nacionalizó" los hidrocarburos poniéndoles un impuesto leonino; entre su súper ministro de hacienda Luis Arce Catacora y nuestro ministro Arenas no hubo grandes diferencias.
Acá mataron la gallina de los huevos de oro igual que en Bolivia, Chile había tenido un crecimiento enorme de las inversiones, pero después de ese impuestazo se cerró la llave y la inversión dejó de fluir. Lo mismo que hizo Morales en Bolivia lo hizo Bachelet en Chile y el resultado fue idéntico: no más inversión, no más crecimiento.
El impuesto a las empresas en 1990, cuando Chile estaba en medio del mayor enriquecimiento económico de su historia era del 10%. Hoy ese mismo impuesto es 27% y los resultados están ahí, el que quiera ver que vea: empobrecimiento fiscal, inflación y desempleo. El crecimiento hoy es solo el recuerdo de un pasado remoto.
Similitud 2: Malas políticas y subsidios
Bolivia hoy tiene un problema gigantesco con el subsidio a los combustibles que ha terminado llevando a la quiebra al país, un callejón sin salida que traerá miseria a millones de personas. Especialmente a los más pobres que son los primeros en caer en estos casos.
2.1 Malas políticas
En Chile se está incubando un problema muy parecido con los subsidios a las cuentas de clientes regulados de energía eléctrica.
Esto también tuvo su origen en el segundo gobierno de Bachelet, cuando se subastaron los contratos de largo plazo por energía de nudo.
El ministro de energía de entonces, Máximo Pacheco Matte declaraba alborozado:
"Chile va a tener energía más limpia y más barata. Las cuentas de luz, a partir del año 2021 bajarán -a lo menos en un 20% (...) Esto va a suceder, esto no es una especulación ni es un pronóstico, es una realidad y va a ser -a lo menos- 20%".
El muy idiota asignó un montón de contratos a empresas "verdes" que -a sabiendas- hicieron ofertas imposiblemente bajas, no había como cumplir a esos precios y pasó lo inevitable: al empezar a operar esas empresas empezaron a quebrar y la tarifa de electricidad regulada en 2022, cuando los contratos estuvieron en régimen, no solo no había bajado un centavo ¡sino que era un 68% más cara!.
Máximo Pacheco Matte estudió economía de la Universidad Patrice Lumumba de Moscú, obtuvo su título en los años de la Unión Soviética así es que debe saber mucho de teoría de la explotación, economía marxista y cosas así.
O sea es un completo analfabeto en estas cosas y su desempeño profesional así lo demuestra.
Un tipo así debería estar vetado de por vida de ejercer cargos públicos, su reputación es infame y ha causado en buena parte la catástrofe en que estamos hoy. Sin embargo, hoy gana una dieta principesca como presidente del directorio de la minera estatal Codelco, la mayor productora de cobre del mundo.
Es como recoger a alguien de la calle y ponerlo a manejar un trasatlántico, responsable de la vida de miles de personas. En realidad es peor que eso, haberlo puesto en esos cargos es una irresponsabilidad criminal. Igual disfruta su patrimonio -conocido- que es de unos veinte millones de dólares.
2.2 Subsidios suicidas
Pero eso no es lo peor, ¿recuerdan el espantoso problema, tal vez el peor, que enfrenta Bolivia con el subsidio a los combustibles? Nosotros nos dirigimos exactamente por el mismo callejón sin salida con los subsidios para las tarifas eléctricas.
Todo empezó en el segundo gobierno de Sebastián Piñera, no porque ahora esté muerto dejará de ser un gobierno infame, en Chile decimos que no hay muertito malo. Bueno, Piñera es un muerto que fue muy malo.
Cuando se produjo la violencia callejera -que él no fue capaz de enfrentar- quedó aterrorizado y ante la expectativa de enfrentar el alza de tarifas eléctricas, producto de la nefasta gestión de Pacheco, Piñera tampoco se atrevió a afrontarlo y congeló las tarifas pasando la diferencia a deuda del estado con las compañías generadoras.
Este fue un subsidio gigantesco del que casi nadie se dio cuenta en su momento y todos los políticos, de izquierda a derecha, pusieron su voto para aprobarlo.
Se suponía que era algo de corto plazo y se volverían a pagar las cuentas normalmente el año siguiente, pero adivinen qué pasó: llegó Boric a la presidencia y siguió congelando las tarifas por dos años más. Ahora el gobierno simplemente no tiene con qué pagar la deuda.
Y los políticos de todos los sectores, repito, tontos y cobardes sin remedio, están alineados con la peor solución de todas las posibles: establecer una especie de subsidio indefinido, no solo para los más pobres sino también para la codiciada "clase media"
Y los electores, el 80% de Pareto, estúpidos como siempre, aplauden la idea a rabiar. Si fuera por ellos lo mejor es que no pagasen un peso de electricidad y que la pague "el estado" ¿no se dan cuenta -pelotudos- que al estado lo financian ustedes mismos y en la pasada se embuchan parte de la plata? O pagan ahora o pagarán mañana, no hay soluciones mágicas.
La brillante idea de estos idiotas es subir los impuestos, en un país donde el peack de La Curva de Laffer se sobrepasó hace más de diez años. Eso traerá sin duda más miseria para todos, se los doy firmado.
Se está repitiendo, una tras otra, cada una de las pelotudeces que hicieron Evo Morales y el MAS en Bolivia ¿Vamos por el mismo camino entonces? Claro que si ¿Llegaremos adonde mismo? Claro que no, porque los chilenos somos huevones hasta la hora de almuerzo nada más, en la tarde se nos pasa.
Esto se demuestra en el enorme desprestigio del gobierno merluzo actual, de los partidos de "centroderecha" y de "centroizquierda", manganadas de zánganos y ladrones que se han llevado para su casa lo que le costó ganar para el país a toda una generación.
Tienen sus días contados, aunque salga elegida la vieja arpía de la Matthei o aunque el Partido Republicano destiña, donde hay uno siempre hay otro.
El Peso de la Noche Portaliano está inquieto y se va moviendo, tal vez lenta y pesadamente pero pasará por encima de todo, porque es el verdadero punto de equilibrio de nuestro país. Así ha sido en toda nuestra historia y así será también ahora.
Ah, y para que no digan que me quedo en puros reclamos ¿saben que haría un verdadero líder político, en lugar de estos pobres diablos que tenemos? Estaría desde hace años metido de cabeza en promocionar la eficiencia energética y el ahorro de energía en todas partes, partiendo por el estado.
Es lo que estoy haciendo yo en la casa: apagar las luces innecesarias, restringir y optimizar el uso de hervidores, planchas, hornos y cosas por el estilo. Se acabó la fiesta señores, llegó la hora de ahorrar. Ahora nos toca a nosotros pagar por las cagadas de Pacheco Piñera y Boric, como dicen en Perú ¡Qué tal concha!
Fuente: https://bradanovic.blogspot.com/
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