FREDDY BLANC SPERBERG
Consejero Nacional Partido Republicano

Descartando intencionalidad por la fecha en que ocurren, entre abrazos, buenos deseos, corchos al cielo, narco artificios y homicidios no pasaron desapercibidos para la ciudadanía dos hechos notables.

El primero es la ya caída de la tercera preferencia de la carta presidencial al cargo de Fiscal Nacional -Sra. Maira-, cuya historia, como sus antecesores, la condenaron en la puerta del horno. Hoy vamos por el cuarto intento con otro mal candidato -al parecer, la experiencia tampoco es suficiente-.

El segundo hecho lo constituye los indultos otorgados por Su Excelencia, cuyo único mérito fue haber cumplido su palabra dada en tiempos anteriores (como todo en la vida, algo debe haber a cambio).

Reacciona la derecha política (Republicanos) y luego el centro (ChileVamos) anunciando su retiro de la cacareada mesa de seguridad aludiendo, acertadamente, la inconsecuencia por parte del gobierno. S.E. se respalda en que es un acto legal, aun cuando la Corte Suprema y la Fiscalía le rebaten con leyes y procesos en mano esa falacia.

La derecha y el centro logran articular a medias una amenaza de acusación constitucional, cuyo proceso no está garantizado por ideas progres, idealistas y falta de conocimiento de importantísimos hechos históricos, enquistadas sobre todo en la juventud parlamentaria del centro.

El choque entre los 3 Poderes hace añorar, a algunos, lo sucedido ante los mismos actos inconstitucionales de Salvador Allende, pozo de inspiración del actual, cuyo desenlace todos conocemos.

Craso error. En esos años los trenes corrían por las mismas líneas y convergían a un punto. Hoy, vemos con desazón que los mismos corren por líneas paralelas y en una misma dirección. Esta vez no chocarán.

Como me dijo un amigo, la ideología no tiene límites morales y la ciudadanía sigue esperando.

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