Osvaldo Rivera Riffo
Presidente
Fundación Voz Nacional


No se puede no dejar de hablar de la entrevista a José Antonio Kast en el programa De Cara a la Moneda.

Las cifras hablan por sí solas, una atención impresionante. Como ejemplo en Política/Tendencia: Presidente 455 mil tweets. Durante el programa Política/Tendencia: 295 mil tweets.

Comparando con la entrevista al candidato comunista, sobre un 80% más. Durante mucho tiempo estuvieron las redes sociales en silencio, mirando y escuchando el desarrollo del programa.

Fue un gran fenómeno comunicacional, muy importante, se mostró la esencia humana del candidato y como fue construyendo su vida hasta formar una familia que mostró en toda su fuerza e importancia.

Así quedó para Chile entero la impronta de la familia como núcleo central de la sociedad. No son palabras altisonantes de un documento, Constitución o ley. Es la vivencia real de su relevancia y como ha podido compatibilizar su trabajo con sus distintas responsabilidades, sabiendo siempre jugar su rol de padre y esposo.

Tanto la tranquilidad que proyecta, sus respuestas concretas y llenas de conocimientos, como su transparente mirada hacen que se agigante la confianza y se proyecte la esperanza de un Chile unido y mejor.

En los últimos artículos he hablado de la importancia de la verdad y del acecho de la diabólica mentira. Sin duda que este es finalmente el desafío que se juega Chile el 19 de diciembre: saber distinguir la Verdad de la Mentira.

Si gana la verdad, habrán triunfado las virtudes de la democracia que hoy se observan difusas: libertad, justicia, orden, seguridad, calidad de vida, preocupación por los adultos mayores, desarrollo social y crecimiento material y espiritual. Volviendo a tener la posibilidad de mirar el futuro con optimismo, alegría y paz.

Si se opta por la mentira no hay mucho que decir, solo se habrá elegido el camino al infierno y sabemos lo que eso significa. Caerán las caretas y el partido comunista aparecerá ondeando el trapo rojo para indicar que ya somos la República Socialista Chilena. Ya lo vivimos, los mayores supongo que no lo han olvidado. Se repetirán frases como:
“no soy el Presidente de todos los chilenos”…
o “queda harina para tres días”…
o “defenderemos el triunfo del pueblo con las armas que llevan a la victoria”

Fue una visita de cortesía al infierno en los años 70, donde conocimos los horrores del socialismo. Hoy será distinto, llegarán para quedarse y el país, modelo de tantas virtudes republicanas, habrá perdido su identidad.

Queda claro que a Chile le falta un padre, pero para eso se necesitan buenos hijos.

La entrevista a José Antonio Kast es la luz verdadera que alumbra el camino correcto. Como lo dijo Aristóteles: la verdad se basa en la verdad práctica, la que se da en el hombre gracias a que surge dentro del alma una opinión verdadera y simultáneamente una acción recta.

Y así es el candidato de la Verdad. Así es el candidato del Viva la Libertad.

¡Así me gusta Chile!!!

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